Hoy
voy a hablar acerca de la dermatitis atópica. Esta entrada pertenece
a la categoría de salud, como la anterior de la dermatitis seborreica, espero que resulte interesante y pueda ser
de ayuda.
Si
te apetece conocer un poco más acerca de esta afección, quédate
conmigo.
¿Qué
es la dermatitis atópica?
La
dermatitis atópica es un tipo de eccema donde la piel
reacciona fácilmente y anormalmente a
alérgenos ambientales, irritantes y alimentos. Se presenta
principalmente en niños y es poco probable que ocurra en cualquier
persona mayor de 30 años, de hecho, aunque el problema aparezca en
los bebés, es muy normal que desaparezca una vez pasados los 36
meses. La piel se vuelve escamosa, roja y con picazón, y es más
susceptible a alguna infección bacteriana. Por ello, es muy
importante consultar con el especialista lo antes posible ya que
podría tratarse de un reflejo de otro problema como la celiaquía o
algún tipo de intolerancia alimenticia.
Este
tipo de eczema se
puede producir en cualquier área del cuerpo. Pero las zonas más
afectadas son, normalmente, las manos, los pies, los tobillos, las
muñecas, la cara, el cuello y la parte superior del pecho. También
se puede producir en la piel alrededor de los ojos y en los párpados.
Causas:
Causas
hereditarias:
Entre
un 50% y un 70% de pacientes con dermatitis atópica tienen
antecedentes de atopía entre sus familiares, por lo que se podría
hablar de herencia genética. Pero esto no explica el aumento
exponencial de personas con dermatitis atópica en los últimos 30
años.
Causas alérgicas:
La
dermatitis atópica casi siempre está relacionada con ciertas
alergias ambientales: casi todos los afectados son sensibles a ácaros
del polvo, epitelio de animales y determinadas plantas como cenizo o
flor del olivo. Igualmente ciertos alimentos como los tomates o la
leche de vaca pueden ser contraproducentes; es recomendable la
realización de pruebas alérgicas para determinar cómo afecta cada
uno.
Causas del sistema nervioso:
Se
trata de una respuesta anormal del sistema nervioso autónomo.
Causas psicológicas y emocionales:
La
piel es un órgano de somatización, es el órgano más extenso y
también es a través del cual se realizan las primeras interacciones
con el mundo y en el que se manifiestan las acciones de las
situaciones de las personas con reacciones favorables o
desfavorables.
Cuando
las situaciones cotidianas sobrepasan el nivel de tolerancia, interés
o ansiedad que una persona les presta normalmente, se vuelve una
situación de estrés, y, al igual que para cada ocasión,
hay diferentes formas de reaccionar antes estas situaciones.
Es
por ello que muchas veces aparecen en niños y adultos erupciones y
no sabemos muy bien por qué es, esto es muy normal en la
adolescencia.
Síntomas:
Sus
síntomas son:
- Picor todo el tiempo (incluso de noche).
- Ampollas que supuran y forman costras.
- Enrojecimiento o inflamación de la piel alrededor de las ampollas.
- Erupción cutánea.
- en niños menores de 2 años las lesiones de piel empiezan en las mejillas, los codos o las rodillas.
- en los adultos la erupción compromete con más frecuencia las superficies flexoras (internas) de las rodillas, los codos y tobillos (sobre todo).
- Áreas de la piel secas y curtidas.
- pigmentación en la piel inferior o superior al tono normal.
- se localizan comúnmente en la parte interior del codo o detrás de la rodilla.
- se pueden propagar al cuello, las manos, los pies, los párpados, detrás de la rodilla o los labios.
- Áreas de la piel en carne viva debido al rascado.
- Pus y sangrado del oído.
- Escozor en la zona dañada.
- Áreas gruesas o con apariencia de cuero, llamadas liquenización, lo cual puede ocurrir después de rascado o irritación prolongados.
Tratamiento:
Es
el especialista el que debe poner el tratamiento, y con mucha más
razón si se trata de niños pequeños, ya que podemos creer que
estamos ante un problema y agravarlo si el tratamiento no es el
correspondiente.
Mi
experiencia:
Mi
dermatitis atópica es resultado de tener una piel reactiva a ciertos
químicos y emocional. En momentos de estrés mi cuerpo se defiende
con eccemas en partes localizadas de mi cuerpo: cara, brazos y
piernas, llegando a extenderse si no lo controlo.
El
tratamiento que me ha funcionado es la crema Elidel y
el Atopicontrol Crema forte de Eucerín. Mucho
cuidado con la crema Elidel, son muchos los efectos
secundarios que tiene y debe ser usada bajo control médico, uno de
los efectos que más he notado ha sido el crecimiento de vello más
grueso, lo que una cosa te quita te da otra. Hace ya mucho que con el
uso de la crema de Eucerin lo controlo y no necesito más. Ésta
última no tiene medicamentos y su uso es seguro. Algo muy importante
es la protección solar, con el sol los síntomas de la
piel se agravan.
El
uso de corticoides e hidrocortisona debe ser durante un corto periodo
de tiempo, y, siempre, controlado por el médico, son muchos los
efectos secundarios, y, a mí personalmente, me producía un efecto
rebote increíble.
No
soy una experta, ni mucho menos, por lo que con este tipo de
artículos sólo quiero dar a conocer posibles problemas que pueda
haber y animar a ir al especialista a toda aquella
persona que crea que puede sufrirlo. Ya sabéis, a la más mínima
señal, al médico, si no es nada, mejor que mejor, y si lo es, pues
a controlarlo antes de que se extienda.
¡Hasta
la próxima!
Besos,
Llanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sugerencias y Comentarios.